El Norte está lleno de frío: "No digas nada" de Patrick Radden Keefe

 Esta crónica radiografía de forma excelente el conflicto reciente de Irlanda del Norte y sus complejos actores. Por sí sola, es una estupenda lección de historia y un testimonio terrible sobre los destinos que les deparan a los seres humanos. Para quien solo haya conocido de forma superficial lo que fueron los años duros del IRA y los 'troubles', es un fascinante y aterrador descenso a los infiernos.

Aun con las cenizas del conflicto humeando, Patrick Radden Keefe indaga, como si de una radiografía criminal se tratase, en ese territorio en llamas que fue la Irlanda del Norte en los años setenta y ochenta, y en los oscuros personajes que habitaron sus ruinas (principalmente, Dolores Price, y ese actor en la sombra que fue Gerry Adams). Sin embargo, no es tanto la profundidad psicológica de esta obra lo que perturba (Keefe relata en tercera persona, y son los hechos los que hablan por sí mismos) sino en la manera en la que encadena esos hechos. Así, como los montadores de los mejores filmes, dota la historia de un ritmo y narración excelentes: el montaje paralelo del secuestro y desaparición de Jean McConville y la infancia y juventud de Dolores Price son dignos del mejor 'true crime'. A su vez, otros episodios son propios de la mejor película de acción: me viene a la cabeza por ejemplo los atentados de Londres, con el autobús escolar acercándose cuando está a punto de explotar una bomba, o la huida de la prisión de Brendan Hughes en un camión de basura. No me extrañaría que se adaptara pronto para el cine o serie de televisión.

Pese al terrible papel que desempeñó (esta crónica es en parte investigación sobre la desaparición de Jean McConville) no es difícil caer fascinado por terroristas como Dolours Price (casada un tiempo con el magnífico actor Stephen Rea, para más morbo). No hay más que ver su fotografía en la cubierta del libro, retratada en los tiempos en los que se presentaba como un icono de la lucha revolucionaria o de la liberación de los católicos de la Irlanda del Norte. Para mi gusto, el libro decae en la última parte, con los testimonios o archivos sonoros del Boston College y algunas de las complejidades legales o judiciales que suscitó, pero no deja de ser una crónica sobresaliente. 

 "No digas nada", de Patrick Radden Keefe (traducción de Ariel Font Prades, Reservoir Books, 2020)